En el corazón del barrio de San José hay un pub con karaoke donde la música es el lenguaje intergeneracional y tú eres la estrella.
La música reduce el estrés, estimula el cerebro, aumenta el optimismo y tiene otros muchos beneficios que Óscar Dionis, propietario del Pub Traste Karaoke desde diciembre de 1998, conoce de primera mano. Este local, de paredes rojas, que está ubicado en el barrio de San José lleva abierto 35 años y por él han pasado cantantes famosos como David Civera y Eva Amaral, cuando todavía no eran conocidos.
El Traste es un punto de encuentro para todas las personas que quieran pasarlo bien y disfrutar del karaoke cantando sus canciones favoritas. Actualmente, las canciones que más piden los clientes, según nos cuenta su propietario, son algunas míticas como Vivo por ella, Bailar pegados, Mi gran noche, Como una ola. Pero también son de gran reclamo otras canciones de cantantes más actuales como Aitana y Ana Mena.
Le preguntamos por su canción favorita a Óscar, a lo que nos responde que le “ponemos en un aprieto” y, aunque le gustan muchas, nos acaba confesando que tiene debilidad por Un velero llamado Libertad de Jose Luis Perales: “Esa canción la canté cuando todavía no tenía el Traste, yo fui a cantar a ese Karaoke”.
El afán por querer llevar el Karaoke a las fiestas de los pueblos y eventos privados hizo que surgiera TrastEventos: “Nos hemos desplazado a un montón de pueblos de Aragón para poner la discomovil y el karaoke”. También han recorrido centros comerciales como Gran Casa o Centro Comercial Augusta, han estado en Gran Vía con el camión de la COPE, Plaza Utrillas y Plaza Reina Sofía y han realizado concursos en Ejea, Tauste y Teruel.
Hace 5 años participaron en el I Campeonato Nacional de Karaoke, organizado por una empresa de Albacete. Contactaban con los mejores karaokes por Comunidades Autónomas y el Traste fue elegido en Aragón. Fueron 170 los participantes que se presentaron en la plaza Utrillas, de ahí salió una voz femenina y una masculina para representar a Aragón. “Llegamos a la final, que se celebró en un crucero” nos explica Óscar.
Durante estos 25 años el negocio ha ido creciendo y aunque la pandemia fue un momento complicado, Óscar vio la oportunidad perfecta para reinventarse: “Se me ocurrió montar en un almacén de 15 metros cuadrados, que está pegado al pub y que corresponde al mismo local, una franquicia de helados. Montamos La Jijonenca y nos va de maravilla”.
Tienen una terraza con 20 mesas que comparte el karaoke y la heladería y que es de gran reclamo para disfrutar de las consumiciones de ambos locales. Nos despedimos de Óscar, un emprendedor nato que ha sabido ver las oportunidades de negocio en el barrio de San José y endulzar con sus helados a todo el que le apetezca. Un amante de la buena música que disfruta de su trabajo y que está siempre dispuesto para llevar la discomóvil y el karaoke a cualquier evento.