JOSÉ MARÍA MARTELES, PRESIDENTE DE CAFÉS Y BARES VALORA LA SITUACIÓN DE LA HOSTELERÍA ZARAGOZANA TRAS EL IMPACTO DE LA PANDEMIA Y LOS FUTUROS RETOS QUE HA DE ENFRENTAR.

EL SECTOR HA PASADO UNA DE LAS PEORES CRISIS DE SU HISTORIA MÁS RECIENTE DEBIDO A LA PANDEMIA. ¿CÓMO SE HA VIVIDO DESDE LA ASOCIACIÓN DE CAFÉS Y BARES DE ZARAGOZA Y PROVINCIA?

Con mucha intensidad, preocupación y desasosiego. Los acontecimientos se sucedieron de forma precipitada. Había un gran desconocimiento sobre la enfermedad (cómo se contagiaba, cuáles eran los síntomas, etc.) y sobre cómo hacerle frente (el Ayuntamiento de Zaragoza anunció el día 13 de marzo la suspensión temporal de instalación de veladores; el día 14 de marzo el Gobierno de Aragón decretó el cierre de los establecimientos de hostelería, medida que fue refrendada ese mismo día por el Gobierno de España, y que se prolongó durante meses).

La afectación a nuestro sector fue total, por lo que el mismo lunes 16 de marzo comenzamos a solicitar reuniones con todas las Administraciones para poner en común información y reclamar medidas a poner en marcha. Esa fue una primera fase. A continuación, en una segunda fase, participamos en la planificación de la reapertura desescalada en condiciones de seguridad. En una tercera fase – la más larga, y sin duda, la más frustrante – centramos nuestros esfuerzos en reclamar, de forma enfática, la adopción de medidas económico – financieras, y a recurrir en los tribunales determinadas normas del Gobierno de Aragón, limitativas o impeditivas al desarrollo de nuestros negocios, que consideramos desproporcionadas y con escaso fundamento y contraste.

¿CÓMO HA CAMBIADO EL TRABAJO EN LA ASOCIACIÓN PARA RESPONDER A LAS NUEVAS NECESIDADES?

Me gustaría destacar el trabajo del personal de oficina, que desde el mismo día 16 de marzo estuvo trabajando – a puerta cerrada, atendiendo al público a través de teléfono y correo electrónico – para dar cobertura a las empresas del sector en todos los trámites que resultaron necesarios, en un clima de absoluta incertidumbre: ERTES, ceses por actividad extraordinarios para autónomos, ICO ́s, Microcréditos, trámites de compensaciones, etc. y, por qué no decirlo, para apoyarlos anímicamente en momentos muy complicados. Trabajo, extremadamente complejo, si tenemos en cuenta la gran cantidad de dudas que se planteaban y la imposibilidad de recurrir a los servicios correspondientes de la administración pública para resolverlos. Creo que es en estas ocasiones cuando se demuestra la importancia de organizaciones empresariales sectoriales.

¿HAN ENCONTRADO EN LA ADMINISTRACIÓN EL APOYO Y RESPALDO QUE MERECE ESTE SECTOR?

Siempre hemos encontrado interlocutores a los que trasladar la problemática existente en cada momento, empatía y escucha, tanto en la administración autonómica como en la municipal – aquellas con las que, por nuestro ámbito competencial, mantenemos una relación fluida –, pero es evidente que las medidas adoptadas para paliar las consecuencias de la crisis han sido muy insuficientes, y aquí hay que incluir también al Gobierno Central.

Nadie comprende que de los 141,3 millones de euros asignados a Aragón para implementar medidas de apoyo a la solvencia empresarial en respuesta a la pandemia de la COVID – 19, se hayan reintegrado 71,7 millones (un 50,7%), y que el principal recurso que se ha facilitado a las empresas sea el endeudamiento. Desconocemos si ha sido una cuestión de falta de capacidad o de voluntad, pero no se ha estado a la altura con un sector que tiene un peso específico en la economía estatal, autonómica y local.

¿CÓMO SE ENCUENTRA ACTUALMENTE LA HOSTELERÍA? PARECE QUE LA PANDEMIA NOS ESTÁ DANDO UN PEQUEÑO RESPIRO, PERO SIGUEN PREOCUPANDO TEMAS COMO LA INFLACIÓN, EL AUMENTO DEL PRECIO DE LA ENERGÍA Y LAS MATERIAS PRIMAS…

Las empresas están mucho más endeudadas que en 2020. Ahora estamos comenzando a afrontar la amortización de los créditos ICO y otras fórmulas de financiación similares, en un escenario de incremento generalizado de costes (alquileres, suministros, aprovisionamientos, etc.) y de ralentización de la actividad económica, en el que se habla de una posible recesión a corto plazo. Debemos ser optimistas, como lo hemos sido ante otras crisis que hemos vivido, pero el escenario para la recuperación no es el más propicio.

Entre las muchas medidas necesarias para garantizar la estabilidad y para incentivar la creación de nuevas empresas en el sector, integrado en su práctica totalidad por pymes y micropymes (un marco jurídico – normativo estable, una rebaja de la carga impositiva, etc.), la más acuciante e inmediata sería la necesidad de llevar a cabo una actuación inmediata sobre el constante incremento de la factura de la luz, que en no pocos casos se ha triplicado o cuadruplicado, y que está ahogando a la gran mayoría de los titulares de empresas.

¿CON QUÉ OTROS PROBLEMAS SE ESTÁ ENCONTRANDO EL SECTOR?

Sin duda, la escasez de personal formado y profesional. Falta un compromiso decidido (a nivel presupuestario y a nivel político) por parte de los diferentes Gobiernos por la cualificación o recualificación profesional vinculada a la demanda de empleo, con programas formativos reales y adaptados a las necesidades de las empresas. Los planes de estudio son extremadamente obsoletos y no responden a las necesidades del sector.

EN ESTE ASPECTO, UNO DE LOS GRANDES PROYECTOS DE CAFÉS Y BARES HA SIDO SU CENTRO DE FORMACIÓN. ¿QUÉ BALANCE HACE DE ESTOS PRIMEROS AÑOS?

El COVID-19 supuso una interrupción en la puesta en funcionamiento del Centro, dado que por razones por todos conocidas estuvo cerrado entre los meses de marzo y septiembre de 2020.

En una fase inicial, el grueso de las acciones formativas que se promovieron se centraron en la implantación en los establecimientos de protocolos higiénico – sanitarios y en la impartición de formación en materia de digitalización básica; en ambos casos, contamos con la colaboración del Ayuntamiento de Zaragoza con el que suscribimos sendos Convenios de Colaboración con Zaragoza Turismo y Economía y Comercio, respectivamente.

Actualmente tenemos una línea de formación diferenciada para titulares de negocios y futuros trabajadores del sector y trabajadores que quieren reciclarse, con formaciones de duración media, escalada por niveles, y eminentemente práctica. Estamos muy satisfechos con los resultados.

¿CUÁLES SON LOS RETOS DE CARA AL FUTURO PARA EL SECTOR HOSTELERO, Y EN ESPECIAL PARA EL ZARAGOZANO?

Un reto fundamental es la digitalización, ad intra (a través de implantación de sistemas de gestión contable, reservas, procesos de trabajo, etc.) y ad extra (presencia en web, redes, posicionamiento, etc.). Para ello, el Kit digital es una herramienta muy útil, pues permite subvención la implantación de soluciones digitales.

Otro, la profesionalización y la generación de vocaciones en los trabajadores actuales y potenciales. Hay que superar la falsa creencia de que cualquiera puede trabajar como camarero, porque es un trabajo que no sólo requiere aptitud sino también actitud, y ambos aspectos se pueden y se deben trabajar.

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