Este establecimiento de la capital aragonesa fundado en el 1943 por el matrimonio Gasca echa la persiana después de 74 años de servicio en plena Plaza Salamero.


A sus 67 años, Javier Gasca echa la vista atrás y recuerda el momento en que sus abuelos, León y Teófila, decidieron fundar en 1943 el Bar La Gasca en la calle Morería número 22. Una vez recaudaron suficiente dinero, se trasladaron a su ubicación actual. Cuando el matrimonio se jubiló, el negocio pasó a sus padres, Ernesto y María Pilar. Desde que tuvo edad para trabajar, Javier regentó el local junto a ellos hasta el momento en que falleció su padre. Su madre y él quedaron al mando del establecimiento.

En las paredes del local se pueden ver pequeños cuadros y recortes de periódico sobre algunos artículos en los que se habla de La Gasca. En ellos se puede ver a un jovencísimo Javier tirando una caña junto a su padre. Incluso se pueden encontrar fotos y postales dedicadas de algunos de sus clientes. Todo un lugar lleno de historia y recuerdos.

Bar La Gasca cierre

Letrero en la entrada del bar, situado en Plaza Salamero | Foto: CYNTHIA LÁZARO

Durante los primeros meses de vida del establecimiento, la afluencia de personas no se hizo esperar y La Gasca se ganó la fama de uno de los bares más característicos de Zaragoza. Sus berberechos y salmueras son dos de sus  símbolos, además de una amplia carta de ginebras y cervezas que el propio Javier introdujo con el paso de los años.

A pesar de que ha pasado mucho tiempo, sigue manteniendo la misma filosofía: unos precios muy económicos. Javier confiesa que cuenta con una gran clientela habitual muy fiel, que ahora llora el cierre. Esta misma clientela que no se ha tomado muy bien que Javier haya decidido echar el cierre: “Les da mucha pena. Dicen que van a hacer una manifestación para que no cierre”, comenta con una amplia sonrisa.

Aunque se trata de un punto y final a una vida de constante y duro trabajo al otro lado de la barra, Javier admite que se siente muy mal: “He nacido aquí y tienes el recuerdo de los abuelos, los familiares y de muchos clientes que incluso se hicieron familia”.

Bar La Gasca cierre

Las salmueras siempre han sido una de sus especialidades | Foto: CYNTHIA LÁZARO

Interior del establecimiento, con fotos y dedicatorias | Foto: CYNTHIA LÁZARO

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Pero el cansancio y la edad no perdonan y, tras muchos años de trabajo, prefiere descansar y dedicarse a cumplir sus antiguos sueños y afrontar todos esos retos que le quedaron pendientes: “Quiero matricularme en derecho para acabar la carrera, ya que no pude porque tenía que trabajar. Me voy a matricular en derecho y también en japonés”, asegura Javier Gasca.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies